Maremoto agrícola global y vacaciones en el valle del Jalón

Mientras decenas de miles de agricultores europeos son fulminados por el dedo vengativo de Vladimir Putin, la cosecha de frutas se acumula en almacenes y frigoríficos de cooperativas y de empresas agrarias españolas. Melocotones y ciruelas en estos momentos, y naranjas y mandarinas en el otoño, aguardan con ansiedad la boca que se las coma o el basurero donde acaben pudriéndose. En este panorama desolador, el editor de Agroicultura se ha tomado unas cortas vacaciones en una huerta aragonesa fértil y sufrida.

Una reseña de Fernando Bellón. Fotos de José Luis Bueno.

Agua y sequía en Aragón

 

Las frutas que este año se están cosechando en el valle de los ríos Piedra y Mesa, tributarios del Jalón, en la provincia de Zaragoza, están resultando más rentables a los agricultores que el año pasado. Esto se desprende de algunas conversaciones mantenidas con labradores de la zona. Las ciruelas se han pagado mejor este verano, así como los melocotones. Y la producción de la presente temporada ha sido mayor en relación con la anterior, cuando las huertas dieron pocos frutos y de baja calidad. Toda una ironía cuando se les veta su entrada en la Federación Rusa. La producción de estas huertas aragonesas mencionadas es nacional, local o se dirige a los conserveros de Rioja y Murcia.

Desde luego, esto no es un dato estadístico, sino una impresión recogida in situ.

Un recorrido por la carretera de Ateca a Jaraba deja ver que sigue habiendo muchas huertas abandonadas en la proximidad de los cauces del Piedra y el Mesa. Después de los frutales, las mayores superficies cultivadas son de maíz, que parece ser más rentable que otros productos. Los campos de almendros y viñedos en las zonas altas, de secano, están tan abandonados como en los últimos tiempos. Las grandes llanuras de cereal del sur de Zaragoza, entre Soria y Guadalajara, ya están cosechadas e invadidas por rebaños de ovejas que hacen, de verdad, su agosto.

En los últimos años algunos agricultores empezaron a tender redes de regadío gota a gota en frutales y en vides. No tengo datos del resultado de este trabajo e inversión.

Carmelo Esteban Pelegrín, cultivador de viña y bodeguero de Ibdes, cuya entrevista publicaré en breve, comentaba que hace cuatro años no llovió en la zona entre enero y septiembre, y la sequía destruyó muchas viñas, sobre todo jóvenes. Su empresa familiar se salvó porque habían instalado riego gota a gota extrayendo agua de un pozo

Según el labrador Vicente Lopez, de la Almunia de Doña Godina, en información al Observatorio de Precios de Productos Agroalimentarios de la Diputación de Zaragoza, los perales y los manzanos han dejado de ser rentables, y la cereza y el albaricoque todavía dan provecho a quien los planta.

 

Se queja López de que “los profesionales agrarios hemos hecho todos los deberes que se nos ha impuesto, nos hemos hecho más competitivos y, aún así, no parece suficiente. Por citar un ejemplo, os diré que mi padre con una explotación cuatro veces más pequeña de la que tengo yo hoy, vivía mejor de lo que lo hace mi generación. Esta es una situación muy grave porque por cada agricultor o ganadero que desaparece en un pueblo, provoca que el medio rural se vaya muriendo poco a poco”.

El cultivo ecológico en los valles del Jalón y del Jiloca es reducido porque el mercado de proximidad lo ignora, aseguran algunos agricultores de la comarca de Calatayud. Hay que llegar al Ebro, leguas antes de Mequinenza, para encontrar, al menos sobre el papel digital, pues no las he visitado, explotaciones agroecológicas. También a lo largo del Cinca en Huesca hay un salpicado de ecoagricultores.

El veto ruso

La preocupación del momento en la agricultura española es el veto ruso a la importación de, entre otras cosas, alimentos de la Unión Europea, en respuesta a las sanciones financieras contra el país eslavo por el conflicto con Ukrania.

Las organizaciones agrarias españolas han acudido al Ministerio de Agricultura. La ministra Isabel García Tejerina les ha recibido y se ha comprometido a tratar el tema con urgencia en la Comisión.

La situación angustiosa de muchos agricultores y las soluciones que unos y otros han puesto encima de la mesa son un ejemplo del vuelo corto de la agricultura convencional.

Según datos del Magrama (Ministerio de Agricultura) España vendió frutas y verduras a Rusia en 2013 por valor de 312 millones de euros. La mayoría, de hueso, melocotones, ciruelas y cítricos, y también tomates.

La propuesta más urgente es retirar determinados productos del mercado, es decir, evitar que lleguen a los puntos de venta. De este modo se consigue mantener los precios. Otra solución es la “no cosecha”, no recoger los productos del campo. Para otros, más generosos, los productos se puede distribuir en las instituciones que ayudan a personas necesitadas, pero esto es caro por el operativo que requiere, y es una propuesta poco asumible por los agricultores, que tendrían que acabar pagando porque se llevaran sus cosechas.

En relación con este tema, merece la pena leer el Informe 2014 sobre desperdicio de alimentos en Italia. 8.000 millones de euros en frutas y verduras y otros productos vegetales se han tirado a la basura el año pasado solo en Italia.

Una vez más los labradores recuerdan que los precios de distribución son la ruina del campo. El mencionado Vicente López decía que “el problema está al final de la cadena agroalimentaria, en las grandes cadenas de distribución. En España, 8 de cada 10 frutas que consumimos se compran en las cinco principales cadenas de distribución. Estas cadenas de distribución no suelen utilizar intermediarios y hay productos que llegan a incrementarse hasta un 500%”.

Es difícil imaginar que las grandes distribuidoras que, entre otras cosas, se dedican a la exportación, por ejemplo, a Rusia, vayan a asumir los costes del boicot ruso en la misma proporción que los agricultores.

 

La emergencia BRICS

El veto ruso durará, de momento, un año, y acaba de entrar en vigor el 7 de agosto.

Una primera reacción del gobierno de Moscú ha sido asegurar que cortar las importaciones de frutas y verduras de la UE beneficiará a los agricultores de la Federación Rusa. El ruido de fondo demagógico es sonoro, porque no se pueden improvisar millones de kilos de productos agrarios, sobre todo de huerta.

Pero las soluciones (para el consumidor ruso) están más cerca de lo que parece.

Por un lado, China se ha comprometido a surtir al mercado ruso de todo lo que pueda comprar y ellos puedan exportar. La compañía Baorong está pensando en establecer un centro logístico, dotado de almacenes refrigerados, y un centro de transportes en Dongning, en algún lugar de su frontera con Rusia próximo a Vladivostok. China y Rusia llevan tiempo estrechando relaciones.

Por otro lado, las autoridades comerciales de Rusia aceleran sus conversaciones con Chile, Argentina, Ecuador y Brasil, para la importación de todo lo que traían de la Unión Europea, informa Russia Today . Es evidente que los costes no serán los mismos, pero cabe pensar que los países americanos procurarán poner precios de los llamados competitivos. Según una cita del Financial Times en Russia Today, las autoridades de la UE están intentando convencer a los países latinoamericanos de que no vendan productos agrícolas a Rusia.

Estos movimientos no son espontáneos e improvisados. Cabe recordar que acaba de celebrarse en Fortaleza (Brasil), en el mes de julio la IV Cumbre de los países BRICS, Brasil, Rusia, India, China y Suráfrica. La reunión coincidió con otra de UNASUR (Unión de Naciones Suramericanas) a la que asistió el mandatario chino como invitado especial. El presidente Xi Jinping también ha efectuado visitas a Chile, Venezuela, Argentina y Cuba. Precisamente en Cuba ha estado también en julio el presidente Ruso, Vladimir Putin, donde se ha permitido poner en evidencia el bloqueo a su país en una nación que sobrelleva el bloqueo yanqui desde hace medio siglo.

Los países BRICS han decidido “la creación de un Banco de Desarrollo radicado en Shanghai y con pretensiones de competir con el FMI y con la hegemonía del dólar. Brasil es el único país americano miembro de los BRICS y por tanto el único en participar en esta iniciativa. Pero si ésta prospera, puede cambiar el significado político de la deuda económica en la América hispana”. Esta información está tomada de “Los BRICS en América: del bricolaje financiero al intercambio técnico bilateral”. El objetivo de China es transformar su moneda, el yuan o renminbi, es una referencia financiera internacional. De hecho, cinco grandes potentes ciudades Shanghai, Guangzhou, Shenzhen, Zhuhai y Dongguan, han emprendido un experimento en este sentido, que asegura las transacciones económicas internacionales fuera del dólar y del euro.

Ante esta avalancha de novedades, cabe preguntarse si los directivos agrícolas europeos (por lo que afecta al tema de esta revista) tienen preparada una respuesta a semejante maremoto económico global. Un golpe más a la agricultura convencional.