Las Mil y Una Muertes de Sarah Bernhardt
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Una reseña de Gaspar Oliver.
El espectro centenario de la diva francesa Sarah Bernhardt se ha encarnado ya en en Burjassot, donde ha estado curioseando en las aulas del centro Díaz Pintado, el espacio donde Antonia Bueno, Denise Blais (actrices), Ana Millás (ayudante de dirección) y Carlos Molina (iluminador) han estado preparando la obra desde hace más de un mes. Los días 8 y 9 de marzo se presentará en el Instituto Francés de Valencia, calle del Moro Zeit, a las 20 horas el viernes, y a las 19 horas, el sábado.
Se trata de la obra LAS MIL Y UNA MUERTES DE SARAH BERNHARDT, escrita, dirigida y co-protagonizada por la directora y dramaturga Antonia Bueno. En ella la actriz-icono de hace cuatro generaciones se enfrenta a una joven performer del teatro de la incomunicación y mantiene con ella un diálogo-pugilato del que sale triunfador el espíritu universal del teatro.
Sarah Bernhardt nació en París el 23 de Octubre de 1844. El 26 de Marzo de 1923 moría en París a los 78 años. Dentro de unos días se cumplirá el 90 aniversario de su muerte.
Sarah Bernhardt fue una figura clave en la historia del Teatro, no sólo francés, sino europeo y mundial. Además de gran actriz, fue también directora, dramaturga y empresaria. Sus inquietudes artísticas llegaron incluso a las artes plásticas y a la literatura; publicó obras de teatro, relatos y otros textos.
Alta y delgada, con ojos oscuros y una inmensa presencia escénica, independiente y culta, dominó la escena durante cincuenta años. Revolucionó el modo en que se interpretaba. En su Hamlet recitaba el «Ser o no ser» en un susurro a media voz, en vez de la declamación retórica de los actores de principios del siglo XIX.
Su interpretación intentaba acercarse a las innovaciones del siglo XX y sus actuaciones en las obras de Shakespeare sirvieron para que el público descubriera a ese autor.
La importancia de su legado traspasa las barreras de su país y de su tiempo.
La acción de LAS MIL Y UNA MUERTES DE SARAH BERNHARDT transcurre en el presente.
La divina Sarah Bernhardt decide asistir al homenaje del aniversario de su muerte, e irrumpe en la escena donde una actriz española está llevando a cabo una performance sobre la figura de la diva. Sarah la transforma en su nieta Lysiane y la conduce junto con los espectadores a través de un viaje a lo largo de su propia vida y de sus mil y una muertes teatrales. En definitiva, a través de la Memoria Escénica de un siglo.
Este viaje, que tiene mucho de iniciático, tiende puentes entre Tradición y Modernidad, logrando que nuestra joven performer española conozca sus raíces, y se sienta al final orgullosa del rico legado de Sarah y de todas aquellas otras grandes mujeres creadoras europeas que la precedieron y de las cuales es heredera.
En 2005 Antonia Bueno escribió LAS MIL Y UNA MUERTES DE SARAH BERNHARDT gracias a una ayuda de Teatres de la Generalitat Valenciana.
En una época ecléctica como la nuestra, donde el escepticismo se ha instalado en el Arte con toda su corte de desmanes y pseudovanguardismos vacuos, es muy fructífero volver nuestro rostro hacia la “Divina Sarah”, que bajo su disfraz de excentricidad encierra un manantial de sabiduría escénica de la que tanto podemos aprender.
El Instituto Francés de Valencia, que ha coproducido la representación, es el mejor marco para realizar un homenaje en el 90 aniversario de la muerte de la gran actriz francesa, acogiendo en su escenario el estreno del espectáculo, enmarcado en la semana de Marzo dedicada a las actividades sobre la Mujer.
