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Los Informativos Electrónicos Cultura y comunicación Series

Los Informativos Electrónicos. La cadena SER de Iñaki Gabilondo. (Capítulo 1)

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Gran Vía de Madrid número 32. Sede de la emisora central de la cadena SER (en los pisos altos).

En la amplia entrada de unos grandes almacenes duermen dos mendigos. Arrebujados y encogidos en la fresca madrugada de otoño, parecen dos paquetes exprés depositados por un cartero burlón y subversor del liberalismo vigente. A uno no se le distingue, tendido y oculto tras unos cartones. El otro es una mujer. Está sentada contra un escaparate, una negraza descomunal, descalza y envuelta en mantas.

Pronto serán las seis de la mañana. El corazón de la ciudad resplandece. Los coches y los transeúntes circulan a sus anchas por las avenidas desiertas. Se diría que los peatones, solitarios, herméticos, van a la deriva. A la luz acaramelada de las farolas, un quiosco de prensa despliega su cromática mercancía como un pavo real en medio de la acera.

Los alrededores de la emisora tienen un aire de bajo Manhattan o de Bloomfontain. Pero no estamos en Nueva York ni en Johannesburgo, sino en la Gran Vía de Madrid, a la altura de Sepu.

Abierto 24 horas

La mitad del equipo de Iñaki Gabilondo ha llegado a la emisora a eso de la media noche. La otra mitad, Iñaki incluido, están en la Ser desde las cinco y media.

Tomando un café han comentado los temas de actualidad y han repasado el guión de las seis horas y pico que han de recorrer. Como autómatas han entrado en el estudio. Suenan los pitos de la hora. Arranca “Hoy por Hoy”.

Para poder decir cosas coherentes y dar al discurso un tono verosímil a las seis de la mañana, no sólo hay que estar despabilado, sino que se ha de tener una idea clara de lo que se quiere hablar.

La media docena de personas que llega con el director de “Hoy por Hoy” de madrugada a la emisora se apoya en otra media docena de periodistas que lleva desde la medianoche en la redacción. Estos a su vez se desplazan a través de la noche sobre un chasis cuyas ruedas han comenzado a lubricar otros dos redactores que llevan trabajando desde la media tarde anterior.

En esencia, lo que podríamos llamar el equipo de “Hoy por Hoy” lo componen catorce personas y el director.

Un equipo, no obstante, que está integrado en la redacción de la Ser. De hecho es parte de la Ser. Cobran de la Ser, igual que Iñaki Gabilondo. Pero, a diferencia de sus compañeros, se dedican casi exclusivamente a “Hoy por Hoy”.

En esquema, sería algo así:

REDACCION DE LA SER, más redacciones de las Cabeceras Territoriales que trabajan PARA TODOS LOS INFORMATIVOS.

A saber:

“HOY POR HOY”: dos redactores de arranque en el turno de tarde. Seis redactores en el turno de noche. Seis redactores en el turno de primerísima hora de la mañana.

“HORA CATORCE”.

“HORA VEINTE”.

“HORA VEINTICINCO”.

BOLETINES HORARIOS.

BOLETINES DE RADIO 80 Y DE SINFO RADIO

La redacción de la SER, como la de otras emisoras de dimensiones nacionales, nunca está vacía, nunca descansa, funciona las veinticuatro horas del día.

Por comenzar en algún punto de este círculo sin principio ni fin, vamos a situar el inicio arbitrario de “Hoy por Hoy” a media tarde del día anterior. Estamos con la pareja de periodistas de la redacción de la Ser, adscritos a “Hoy por Hoy”. Llevan trabajando desde las siete de la tarde.

No han participado en el informativo de las 20:00 ni en el de las 22:00, pero están al corriente de todo lo que se ha dicho en ellos, y han recogido de ambos los cortes de voz (declaraciones de personajes de actualidad) que consideran destacables; hacen una copia de estos cortes en cintas propias, y las rotulan para que cualquiera de los compañeros del relevo pueda conocer su contenido.

Otra de las actividades básicas de esta pareja es preparar las entrevistas más tempraneras de “Hoy por Hoy”. Acuerdan con aquellos a quienes van a telefonear la hora y el contenido del diálogo. Si el personaje no desea que lo despierten o no va a estar localizable, se le graba la entrevista. Un modo de proporcionar mayor garra a esta grabación es dejar escritas las preguntas, para que Iñaki Gabilondo, al día siguiente, las formule. A esto se le llama “falso directo”.

La decisión de entrevistar a determinado personaje no es exclusiva de la pareja de redactores, sino que depende de las reuniones de la dirección de la redacción con los jefes de sección y con los editores de los informativos. De estas reuniones se dará cuenta más tarde.

Antes de salir de la redacción para ir a casa, o quizá para zambullirse en el caleidoscopio de la noche madrileña, estos periodistas pasan todos sus papeles a los que acaban de incorporarse, y les documentan sobre cuantas cosas parezcan oler a noticia o a acontecimiento. Algunas de ellas son previsiones y anuncios oficiales, pero otras pueden ser intuiciones o rumores que tendrán que confirmarse al día siguiente.

He aquí un ejemplo de las notas que prepara la pareja de redactores de la tarde-noche.

Avisos:

Durán i Lleida no podía intervenir a las 08:00 en directo porque salía de viaje. Llamarán a los teléfonos de redacción (761 ó 763) antes de las 07:20 para que durante la desconexión Iñaki pueda grabar la entrevista.

— La Romería de la Virgen de la Fuensanta, en Murcia, tendrá varias entradas a lo largo del programa. Lo hará Alberto Castillo. (Redactor del centro territorial de Murcia).

— Para Paloma: sería muy interesante conocer los datos de audiencia por la lucha Valenzuela-Campos y por los diferentes informativos.

— Nos piden de la Fundación Alzheimer España que comentemos en el programa el concierto que tendrá lugar el viernes en el Auditorio Nacional de Madrid para recaudar fondos. Dejamos la carta con todos los datos.

— Quedan grabaciones de: a) comentario de David Solar sobre la abdicación de los papas, para las 10:30; b) Confidencial económico de Ana Muguerza; c) El bestiario de Josep Martí.

El resto de capítulo puede seguirse leyendo (y/o descargarse) en el PDF adjunto

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